Davey Johnson y Bob Melvin son los Managers del Año.
NUEVA YORK -- Davey Johnson, de los Nacionales de Washington, y Bob Melvin, de los Atléticos de Oakland, fueron nombrados el martes como Managers del Año en las Grandes Ligas, repitiendo un trofeo que ambos ganaron previamente con otros equipos.
Johnson dominó ampliamente la votación de la Asociación de Periodistas de Béisbol de Norteamérica. Recibió 23 de 32 votos de primer lugar.
Dusty Baker, de los Rojos de Cincinnati, ganó cinco y fue segundo. Y Bruce Bochy, de los campeones de la Serie Mundial Gigantes de San Francisco, recibió cuatro y fue tercero.
Melvin, a su vez, fue elegido estrechamente sobre Buck Showalter, de los Orioles de Baltimore, con 16 votos de primer lugar, comparado con 12 para Showalter. El tercer candidato, Robin Ventura de los Medias Blancas, no tuvo votos de primer lugar. En su primera campaña con Oakland, los Atléticos, con un equipo cargado de novatos, tuvieron una mejora de 20 victorias, finalizaron 94-68 y sorprendieron a casi todo el mundo ganando la división oeste de la Liga Americana con la nómina menos costosa en las mayores.
Aún así, el poco pretensioso Melvin se mostró sorprendido por el galardón.
"Absolutamente sorprendido. Buck tuvo tan buen año", dijo Melvin en MLB Network.
Johnson, que cumple 70 años en enero, obtuvo el premio por segunda vez. Fue el mejor mánager en la Liga Americana en 1997 cuando estaba con los Orioles, un galardón que recibió horas tras haber renunciado al puesto por una disputa con el dueño del equipo.
Esta vez Johnson va a tener tiempo para disfrutar sus laureles.
Los Nacionales anunciaron este mes que va a ser el piloto en el 2013, cuando será el manager de más edad en las mayores. En el 2014 Johnson va a dejar la banca y convertirse en asesor del equipo.
"La Serie Mundial o nada", le dijo Johnson a la cadena televisiva MLB Network. "De todas formas va a ser mi último año".
Washington ganó su segundo premio de postemporada. El lunes, el jardinero Bryce Harper fue proclamado como el Novato del Año en la Nacional. Washington terminó con un récord de 98-64, tomando la punta en la división Este en mayo y adueñándose del primer lugar hasta el final. Impulsados por Harper y por el candidato al Cy Young Gio González y la actitud combativa de sus jugadores, los Nacionales escenificaron béisbol de postemporada en la capital del país por primera vez desde 1933.
En los playoffs no les fue tan bien. Sin su as Stephen Strasburg -- la gerencia del equipo decidió que había lanzado lo suficiente en su recuperación de una operación del codo -- Washington dejó escaparse una ventaja de 6-0 en el decisivo quinto juego de la serie divisional ante San Luis.
Johnson digirió una nómina diversa, formada por jugadores jóvenes y experimentados, recién llegados a los Nacionales y veteranos. Johnson, que como pelotero participó en cuatro Juegos de Estrellas, ganó tres Guantes de Oro, dos Seriues Mundiales y tuvo la distinción de ser el último en batearle de hit al legendario Sandy Koufax, habla con voz suave, un poco ronca, pero siempre capta la atención.
En ocasiones alzaba la voz -- le gustaba gritar "¡whack-o!" cuando los Nacionales jonroneaban.
Johnson guió a los Mets de Nueva York al cetro de la Serie Mundial en 1986 y más adelante fue piloto de los Rojos, los Orioles y los Dodgers, llevando a los dos primeros a la postemporada.
Con cinco novatos en la rotación abridora, los Atléticos fueron una de las mayores sorpresas del béisbol este año, especialmente luego de cambios y transacciones que diezmaron la nómina. Oakland no dejó jamás que el pánico dominase, reflejando la calma exhibida por su piloto, y superó a Texas en la última semana para ganar la división.
Los Atléticos se fueron 72-38 después del 1 de junio, el mejor récord en las Grandes Ligas. Se convirtieron en el primer equipo en la historia en remontar un déficit de al menos cinco juegos con menos de 10 por jugarse para ganar una división. Los Atléticos perdieron en la primera ronda de los playoffs contra Detroit.
"Nosotros tratamos de abordarlo día a día", dijo Melvin. "Hay que darle a los jugadores crédito por salir al terreno cada día y preocuparse solamente por ese día".
Fuente: LasMayores.com